Si Dios es bueno, ¿por qué permite cosas malas?
manuelita otero
Alguna vez te has preguntado, “si Dios es bueno, por qué permite cosas malas, injustas, dolorosas, difíciles y trágicas”. A veces las cosas que están sucediendo alrededor del mundo, en nuestra vida, en la vida de algunos amigos y familiares son demasiado duras, tanto que ni siquiera las podemos comprender. Entonces muchos acudimos inmediatamente a Dios y le rogamos que arregle todo y que se lleve el dolor que sentimos.
A menudo tratamos de explicar algunas cosas basándonos en nuestro entendimiento y perspectiva, pero también algunos olvidamos que Dios ve mucho más de lo que vemos nosotros, Él lo ve todo y sabe el plan completo mientras nosotros -a duras penas- vemos un pequeño pedazo del plan. Su perspectiva es perfecta y completa. “Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia.” (Proverbios 3:5)
Para tratar de entender por qué las cosas malas suceden tenemos que regresarnos al tiempo en el que Adán y Eva vivieron en el Jardín del Edén. Ellos tenían todo lo que necesitaban para ser felices en un lugar perfecto en el que disfrutaban de la compañía de Dios, pero escogieron desobedecer a Dios y el mal llegó al mundo. Es muy difícil entender por qué lo que un hombre hizo hace tanto tiempo está afectándonos aún hoy. Se siente injusto. “Por medio de un solo hombre el pecado entró en el mundo, y por medio del pecado entró la muerte; fue así como la muerte pasó a toda la humanidad, porque todos pecaron.” (Romanos 5:12) Pero Dios es bueno y Él sabía lo que iba a suceder y creó una forma para que incluso después de esto pudiéramos estar a su lado. Él envió a Su hijo Jesús para que cargara con nuestros pecados. Jesús fue crucificado y en la cruz cargó todos nuestros pecados y pagó por ellos. Sí, por los tuyos, por los míos y por los de los demás. El pagó el precio por el pecado de la humanidad y cuando aceptamos el sacrificio que Jesús hizo por nosotros, somos libres y recibimos vida eterna.
¿Esto significa que no le pasan cosas malas a las personas que aceptan a Jesús? No, aún vivimos en este mundo y cosas malas pasan a diario, pero la diferencia es que sabemos que este no es el destino final, estamos pasando un tiempo antes de llegar al cielo. Es parte del camino. Jesús fue muy honesto sobre el dolor que íbamos a vivir en este mundo “Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo.” (Juan 16:33)
Pero entonces si la muerte y la maldad han sido derrotadas, ¿por qué Dios no arregla el desorden en el que estamos viviendo? Él lo hará. En Apocalipsis 21:4 leemos “Él les enjuagará toda lágrima de los ojos. Ya no habrá muerte, ni llanto, ni lamento, ni dolor porque las primeras cosas han dejado de existir.” Jesús va a regresar y cuando lo haga todo el mundo va a estar frente a Él y tendrá que rendir cuentas de su vida. Dios no se está demorando en regresar... “El Señor no tarda en cumplir su promesa, según entienden algunos la tardanza. Más bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie perezca sino que todos se arrepientan.” (2 Pedro 3:9). Él nos está dando tiempo para que volvamos nuestros ojos a Él.
Si estás pasando por dificultades, no hay mucho que yo pueda decirte para hacerte sentir mejor, pero sé que Dios sí puede. Aférrate a Él y llénate de su paz. Él te entiende, a Él le importas y Él puede tomar cualquier situación por la que estés pasando y convertirla en algo bueno aunque no parezca. Aférrate a su promesa: “Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito.” (Romanos 8:28)
No podemos hacer que el pecado de este mundo sea más grande que Dios. Necesitamos aferrarnos a Él y enfocarnos en Él mientras llevamos su luz de esperanza a todas partes a donde vamos. Este es el momento.
Manuelita